09May

Esta semana ha comenzado un nuevo capítulo en la historia del Santuario de San Miguel de Aralar. La antigua puerta, dañada gravemente en un ataque vandálico ocurrido en octubre de 2024, ha sido desmontada y trasladada a la Factoría Marítima Vasca Albaola (Pasaia), donde dará comienzo su proceso de reconstrucción artesanal.

Lejos de detenernos en el dolor causado por aquel acto dañino, desde el primer momento nació una voluntad colectiva de respuesta: reparar, reconstruir y convertir la herida en una oportunidad para fortalecer nuestra identidad, nuestros valores y nuestros lazos como comunidad. Así nace el proyecto «Mundu berri baterako ateak» (Puertas para un nuevo mundo), una iniciativa conjunta del Santuario, Albaola, Clau Creative y Virtualan que combina patrimonio, cultura y espíritu de colaboración.

Una puerta con historia

La nueva puerta será construida a mano con madera de roble proveniente de Sakana, cargada de significado y profundamente vinculada al territorio. La misma madera se utiliza también para la construcción de la nao San Juan, réplica de un ballenero del siglo XVI, lo que aporta al proyecto una conexión directa con otras formas de preservación del patrimonio y del saber hacer tradicional.

El proceso ha comenzado con el desmontaje y traslado de la antigua puerta hasta el astillero de Albaola, donde se realizará su reconstrucción siguiendo técnicas tradicionales de carpintería de ribera. Además, todo el proceso ha sido cuidadosamente documentado gracias a la colaboración de Virtualan, mediante digitalización 3D, fotografía y vídeo, con la productora Clau Creative, asegurando así su conservación y difusión en formatos accesibles y contemporáneos.

La ruta al nuevo mundo

La nueva puerta será trasladada de vuelta al Santuario siguiendo un recorrido especial: un carro tirado por bueyes atravesará distintos pueblos navarros, conectando el mar con la montaña, el pasado con el presente, y haciendo visible el mensaje de reconstrucción colectiva. Una acción simbólica que evoca el auzolan, esa forma ancestral de trabajo común que hoy cobra más sentido que nunca.

Desde el Santuario de San Miguel de Aralar queremos invitar a toda la ciudadanía a seguir de cerca esta historia. Compartiremos los avances del proyecto a través de nuestras redes sociales y página web, y organizaremos actividades y encuentros en los próximos meses para vivir este proceso de forma colectiva.